miércoles, 3 de junio de 2015

Ave, a veces...


Un ave se posa, a veces, en espinas venenosas
Siente el  líquido mortífero recorrer su sangre
Recuerda entonces la luz que alguna vez fue
Ave, a veces... que se olvida de volar
Dentro carga el reflejo de su mirada abismal
Se sumerge en sí mismo, reposa entre sombras
Pronto se percata de su forma humana
Ave, a veces… que se olvida de volar, de nuevo